Sube la temperatura. Los montones de nieve que hay por las esquinas empiezan a menguar y a revelar lo que escondían. Esta es la época del año en la que probablemente más de uno descubre dónde había dejado la bicicleta aquel divertido
viernes de enero, por ejemplo.
1 comentarios:
Dios qué vistas... jajajaja, hay que rebuscar para encontrarla, jajajaja
Publicar un comentario